En
el mes de amor y amistad, la primera forma de mostrar amor es a nosotros mismos
y el cuidado de la piel puede ser un comienzo. La piel es el órgano más grande
del cuerpo y el que se encuentra expuesto para protegernos de bacterias,
sustancias químicas y temperaturas, por eso, es tan importante saber que
hábitos se debe tener en cuenta para la protección de la piel.
Tipos
de piel
- Piel normal: Una piel “normal” se resalta por estar de forma equilibrada, los poros son pequeños, su textura es suave, lisa y por lo usual no presenta sensibilidad.
- Piel seca: Este tipo de piel produce menos sebo que la normal, porque es baja en lípidos, lo que significa que su retención de humedad es baja. Como consecuencia de esta piel se puede evidenciar lo áspera y frágil que es. La sensación que tienen las personas con este tipo de piel es tensa y envejecida de forma prematura.
- Piel grasa: Se caracteriza por el exceso de sebo dando un brillo en la piel. Las consecuencias de la piel grasa son poros dilatados con acné. Las presencias de acné suelen ser mayores en la cara, cuello y espalda.
- Piel mixta: Significa que la piel es seca pero en las zonas de frente, barbilla y mentón presentan síntomas de piel grasa.
La doctora Olga Forero,
dermatóloga con más de diez años de experiencia nos comparte unas
recomendaciones.
Recomendaciones
1.
La limpieza de la piel es muy
importante, tanto mujeres como hombres deben realizar una rutina de limpieza,
pues durante el día la piel está expuesta a toda la contaminación que existe.
Los beneficios de la limpieza es eliminar suciedad, sudor, grasa y el
maquillaje. Una piel limpia puede absorber mucho mejor los productos para la
piel.
2.
Es esencial la hidratación porque la
dermis (capa superficial de tejido) está compuesta por el 70% de agua, mientras
la epidermis (segunda capa) en un 15%, por ello, la importancia de un
hidratante que permita tener equilibrada la humedad de la piel.
3. La
vitamina D es fundamental y para generar una absorción de forma adecuada se
debe realizar una exposición solar bajo las siguientes condiciones: que sea sin
protección de bloqueadores, pero solo diez minutos con un sol que caiga sobre
los antebrazos y la cara, de preferencia en las horas de sol que no tienen
picos de riesgo, es decir de 8 a. m. a 10 a.m. o de 4 p. m a 5 p. m.
4. En el cuidado diario se debe incluir un protector solar,
no importa el clima que este en el momento, el protector ayudará a reducir los
efectos del sol.
5.
Escoger un maquillaje hipoalergénico es
muy favorable, porque está hecho para cualquier tipo de piel, además, de
prevenir la aparición de acné, y reducir los riesgos de irritación.
La piel es el
reflejo del estado de salud, por eso, es fundamental que los cuidados vayan de
la mano de una buena alimentación e hidratación, así se podrán evidenciar los
resultados en una piel tersa y suave.
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